El repaso a mis gustos musicales había llegado hasta las puertas de los 90. Pero regreso a finales de los 70 y principios de los 80 porque me quedaban cosas por recordar: la música de las discotecas de aquella época.No era mi música favorita, no era la música que compraba para escuchar en casa, pero era la música con la que bailábamos, nos divertíamos y a veces hasta abrazábamos a una chica...
Me encantaban las fiestas, me encantaban las discotecas. Vivía en Ceuta aún, y en la discoteca La Mazmorra, en La Cueva, en La Ballena y luego aquellas fiestas de instituto, de algunos colegios, del Club Natación Caballa... con todos mis amigos y amigas, qué bien lo pasábamos. Qué sonaba por entonces?. Cosas tan variopintas como Miguel Bosé y su Superman o Paul McCartney y Comin' Up.
Trataré de recordar algunas canciones:
Tragedy y Staying Alive, de los Bee Gees. Y por supuesto todos los temas de Saturday Night Fever y Grease que llenaban las pistas de baile de la época, sumergidas en la "travoltamanía".
La música disco de Bonney M (Rivers of Babylon, Daddy Cool), Imagination (Just and Illusion), Anita Ward (Ring my Bell), los Earth, Wind & Fire (September), el genial "Borned to be Alive" de Patrick Hernandez, Pino D'Angio (Que Idea), Chic (The Freak) y no digamos los éxitos de Village People (In The Navy, YMCA...) de Gloria Gaynor (I will Survive), cualquier cosa de ABBA (Voulez-Vous, Chiquitita, Waterloo, Dancing Queen), sin olvidar Funky Town (Lipps Inc.) o los Jackson Five (Boogie, con un Michael Jackson aún negro y de carne y hueso). Comenzando con una nueva era en la música escuché el primer tema rap de la historia, el Rapper's Delight de Sugarhill Gang (rememorada dos décadas después por las Ketchup con su "Aserejé") y algo parecido al rap pero hecho por músicos blancos como Tom Tom Club (Wordy Rappinghood).
Y las canciones melosas en castellano o italiano con las que nos conseguíamos acercar más que nunca a nuestra chica...: los Pecos (Acordes), Umberto Tozzi (Gloria, Te Amo) y de nuevo Miguel Bosé (Linda).
Conforme iban terminando los 70's y comenzaban los 80's se escucharon en las discotecas y sobre todo ya en los disco-pubs, temas de bandas que con el tiempo se han convertido en legendarias, incluyendo a Dire Straits y sus primeros éxitos: Lady Writer y Sultans of Swing. Del 81 recuerdo un grupo que con el
tiempo se convirtió en uno de mis favoritos durante toda la década, y aún hoy día: ABC y su "The Look of Love". Era un nuevo estilo de pop-soul-funky blanco que empezó a sonar en los 80 y tendría su continuidad en grupos como Simply Red (Picture Book) y con Level 42 (Running in the Family). Y qué decir de Pink Floyd sonando en una discoteca... algo que hasta entonces habría parecido surrealista, y sin embargo todos empezamos a corear "We dont need no education, we dont need no drugs control". Habían publicado "The Wall". En aquella época parecía que toda la música podía ser bailable. Éxitos como "Hit me with your Rythm Stick" de Ian Dury, Da Ya Think Im Sexy de Rod Stewart, Whatever You Want e In The Army Now de Status Quo, o Dont Bring me Down, de la E.L.O., Another One Bites de Dust, de Queen, pasaron por todas las discotecas durante esos años.También las grandes baladas de la época, Angie, de los Rolling Stones (pese a ser de 1975 fue uno de los mejores bailes lentos de toda una década), Kansas (Dust in the Wind), el Hotel California de Eagles y el delicioso If You Leave me Now de Chicago. El inolvidable Year of the Cat de Al Stewart. O el mismísimo Rocket Man de Elton John, que nunca dejaba de estar de moda, aunque en estos años ya se escuchaban otros éxitos de sus albumes 21 at 33 (Little Jeannie) o Two Low for Zero (I Guess That's Why They Call it The Blues).
La música reggae también hizo su aparición en las discotecas con Could You Be Loved de Bob Marley y los éxitos de Eddy Grant (Living on the Front Line). El toque europeo de esa música lo ponían The Police con su Walking on the Moon y The Clash algunos temas de su álbum Sandinista (Magnificent Seven, One More Time, One More Dub). No puedo resistir aquí nombrar el magnífico London Calling, obra imperecedera donde las haya, pese a que en ese álbum aún estaban muchos más enraizados con el punk que con la música de baile, si bien el tema que da título al disco tiene reminiscencias de música ska. Siguiendo con este estilo, recordar las canciones más locas para bailar de aquellos años: Los Bad Manners (Lip up, Fatty), Madness (A Step Ahead) , The Specials (A Message to you, Rudy) y UB40.
Pronto se empezarían a escuchar también éxitos de la música synthi-pop, cuyos intérpretes eran llamados con el ampuloso nombre de New Romantics, posiblemente por el tipo de música a veces lúgubre y soñadora de esa gente y sus pomposas vestimentas, como Ultravox, Yazoo, Visage, Depeche Mode, Eurythmics, Duran-Duran, Spandau Ballet. Y canciones... la famosísima Bette Davis Eyes de Kim
Carnes, Cambodia de Kim Wilde, etc. Los antecedentes de esta música los podemos encontrar en los mayores genios de la música electrónica de todos los tiempos: Kraftwerk (The Model, Trans-Europe Express) y Jean Michel Jarre, que se había anticipado a todos lanzando Oxygene en 1977.Pero esto ya supondría el final de la música "disco" tal como la conocimos a finales de los 70. Empezaba una nueva época, los 80 nos traerían además psicodelia (Residents, Tuxedomoon, Cabaret Voltaire, Durruti Column, Joy Division) movida madrileña (aquí me quedo con Burning y sus No es Extraño que tú Estés Loca por mi o Qué Hace una Chica Como tú en un Lugar Como Este?, y la Chica de Ayer de Nacha Pop, la Estatua del Jardín Botánico de Radio Futura, y algunos temas de Alaska) mucha música pop que sonaba en todas las discotecas pero que se alejaban cada vez más de lo que se había sido hasta entonces la música para bailar.
Por entonces yo en casa seguía comprando todo lo que podía de King Crimson, Yes, Pink Floyd, Alan Parsons, Mike Oldfield, Tangerine Dream, Genesis, Supertramp, David Bowie y Peter Gabriel... y esos nuevos grupos como Dire Straits, Soft Cell, Depeche Mode y Duran Duran (Rio siempre me pareció una obra maestra). Y descubriendo cosas que me parecían absolutamente vanguardistas como un disco de Brian Eno & David Byrne: "My Life in the Bush of Ghost", que cambió radicalmente mi concepción de la música. También me llamó la atención el rock que se estaba haciendo en Andalucía y que entremezclaba el sonido propiamente andaluz (flamenco) con el rock sinfónico británico: Triana, Imán y Cai. Y no es que olvide a Alameda o Medina Azahara, simplemente nunca me gustaron.
Otras músicas españolas como Asfalto (Días de Escuela es una de las canciones en español más legendarias que recuerdo), Cucharada (El Limpiabotas que quería ser Torero) y los geniales Bloque (Bloque, El Hijo del Alba), completaron todo lo que yo pude escuchar en los años que van aproximadamente de 1977 a 1984.
Fotografía: Boney M
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