viernes, 8 de agosto de 2008

Olímpica emoción

Siempre me gustaron los chinos. Son gente... no sé cómo decirlo. Son gente con una mentalidad colectiva de pueblo, y mira que son numerosos.
En esta España nuestra, relativamente pequeñita, con nosécuántas comunidades autónomas, tenemos un problema de nacionalismo que a mi personalmente me desagrada muchísimo. Pienso que un pueblo debe estar unido y sentir que tiene un proyecto común, de otra manera cada uno tira para su lado y es muy difícil progresar.
Los chinos no sólo tienen una extraordinaria mentalidad común, siendo más de 1200 millones, sino que además tienen una felicidad común. En estos días se han oído encuestas sorprendentes: el 80% de los chinos se declaran felices y completamente de acuerdo con todas las cuestiones, digamos peliagudas, sobre las que se puede preguntar a una persona: si se siente a gusto con el sistema político, económico, social, de su país, y si personalmente se siente realizado en su trabajo, economía, etc. Me gustaría que esa encuesta nos la hicieran en los mismos términos a los españoles, a ver qué porcentaje dábamos.
Bueno pues a lo que iba, esa mentalidad colectiva y feliz se ha notado en la inauguración de los juegos. Personalmente me ha emocionado, mucho, muchísimo, hasta el punto de hacérseme un nudo en la garganta con algunos momentos del espectáculo, principalmente cuando un grupo de 1400 han formado una preciosa paloma con vida propia y luego una figura que se asemejaba sorprendentemente (cuando las cámaras se acercaban y se veían las posiciones de los pares de personas, era increíble) al mismísimo estadio olímpico, el Nido de Pájaro.
Bien por los chinos, me gusta esa gente, aunque me da pánico pensar que esa enorme masa de población se está occidentalizando, lo que quiere decir que están cogiendo "malas costumbres" (...) como comer todos los días, vestir mejor que hace 10 años, tener el doble de coches, el doble de bienestar... Y me preocupa eso porque el planeta no da para más consumidores, así de radical.
En cualquier caso, los admiro, me parecen gente extraordinaria y... esta noche voy al chino a cenar!!!.