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Esta entrada está inspirada por un documento que vi el domingo en el programa de Iker Jiménez, Cuarto Milenio. Lo sigo desde que empezó en la radio, siempre me ha interesado la parapsicología aunque soy reacio a creer en muchas de las explicaciones que nos dan sobre hechos inexplicables, pero añadir un toque de misterio a la vida no está nada mal.
Iker ha tenido momentos de duda en su programa televisivo, momentos en los que he sentido que algunos reportajes caían más en hechos de superchería o absurdas creencias populares que en parapsicología de un nivel aceptable. Pero creo también que Cuatro ha apostado por él y por su programa, actualmente tiene un plató magnífico ("La Nave del Misterio") y el programa me parece bastante interesante, con reportajes de investigación bien trabajados y argumentados.
Como dije, en su último programa hizo un buen y amplio reportaje de un tema que, aunque conocía, no deja de sorprenderme cada vez que veo de nuevo las imágenes. Los geoglifos.
La definición de geoglifo no es complicada: el ser humano actúa sobre el terreno para crear figuras, dibujos, etc. Las técnicas son variadas, habitualmente por adición o sustracción en el terreno, añadiendo piedras oscuras o claras, o retirándolas, o "puliendo" la capa oxidada del terreno de manera que el color del sustrato inferior sea más claro y visiblemente marcado.
Sea como sea, la importancia del geoglifo no es la definición. Es el significado. Las llaman pinturas para ser vistas por los dioses, o por los extraterrestres. Y desde luego, tienen el misterio de las construcciones de la antigüedad, cuyo significado obviamente no es lo palpable, sino algo que, de alguna manera, va "más allá". Léase pirámides, por ejemplo. La cronología de los geoglifos no está bien especificada, pero en cualquier caso son lo suficientemente antiguas para que los hombres que las crearon no pudieran contemplarlos... desde arriba, que es de lo que se trata.
En el programa de Iker se hizo hincapié en un aspecto sorprendente. El geoglifo, está claro, está hecho para verlo desde altura. A ras de tierra puede pasar desapercibido, aunque habitualmente ocupan laderas de montes y los ves si prestas atención. Desde una avioneta, se percibe bien su forma y tamaño. Pero la visión clara, perfectamente definida y perfilada, se obtiene desde la toma de un satélite.
Lo que signifiquen los geoglifos nunca lo sabremos. A veces es mejor disfrutar lo que se ve sin hacerse mayores planteamientos.
Iba a extenderme más en el reportaje fotográfico de este archivo, pero he encontrado un trabajo bien hecho en:
http://creactivartemental.blogspot.com/2007/11/geoglifos.html
miércoles, 10 de septiembre de 2008
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